- Se trata del Nereus Highway que, tras pasar por puertos chinos y japoneses, llega a Barcelona para carga y descarga de vehículos y carga proyecto.
- K Line está representada en España por BERGÉ.
K Line, representada en España por BERGÉ, ha incluido Barcelona como escala en el viaje inaugural de su nuevo barco Nereus Highway, propulsado íntegramente por GNL, con capacidad para 7.000 vehículos y que forma parte de la serie de 11 barcos que la compañía ha encargado y que serán puestos en circulación en los próximos años.
Tras salir de los astilleros chinos el pasado mes de agosto y haber escalado ya por puertos de China y Japón, el barco car carrier (PCTC) ha llegado al Puerto de Barcelona para la operativa de carga y descarga de vehículos y carga proyecto, desde donde partirá hacia el norte de Europa.
Con motivo de esta escala inaugural, la Autoridad Portuaria de Barcelona ha celebrado un acto de homenaje, algo tradicional cuando recibe barcos que escalan por primera vez en el puerto, en el que se la hecho entrega de una metopa conmemorativa al capitán del navío, en el que ha estado presente Lluís París y Anna Llisterri por parte de la Autoridad Portuaria; y Susanna Hakobyan, Jan Handler y Aleix Martínez Catasús, por parte de BERGÉ.
Este barco está 100% propulsado por GNL, dejando de lado el clásico fuel oil que utilizaban los barcos en el pasado, ajustándose de este modo a los nuevos estándares ecológicos que demanda el mercado y contribuyendo a la sostenibilidad de toda la cadena de valor.
BERGÉ es agente general en España de K Line y comercializa servicios de importación/exportación desde el Puerto de Barcelona con destino a la costa este de Estados Unidos y Golfo de México, así como Asia, desde el Puerto de Santander.
Los buques propulsados por GNL permiten una reducción del 21% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en comparación con los combustibles marinos convencionales. También las emisiones de otros contaminantes, como los óxidos de azufre (SOx), los óxidos de nitrógeno (NOx) y las partículas (PM), son cercanas a cero cuando se usa GNL, ayudando así a un transporte más respetuoso con el medio ambiente y reduciendo la huella de carbono de las mercancías transportadas.